Con este sake tenemos el diamante de esta pequeña bodega local en la que solo se utilizan métodos tradicionales. La bodega se encuentra al pie de la montaña Tsukuba y produce Junmai Daiginjo fermentado a bajas temperaturas durante largos períodos y no micro-filtrado al final del proceso. Al final del procedimiento, el prensado se realiza de forma manual con una "técnica Fukurou tsukuri" (técnica muy rara ya casi en desuso a partir del cual se obtiene la Shizukushu = natural de prensado), que cuelga la bolsa de sake y se deja gotear el contenido en la botella sin presión o violencia sobre el líquido, para extracción natural.
Al probar este sake, tenemos la impresión de estar todavía en la sakagura y de haberlo tomado directamente del barril por la frescura que tiene. Bouquet, bouquet y bouquet de aromas. Una multitud, y todos los que quieren sobresalir en un equilibrio fuerte y presente, pero sigue siendo elegante.
Una combinación de frutas (típico de Junmai Daiginjo), sino también en otra causa aroma herbáceo son mucho más suaves y es difícil de reconocer, en la boca una acidez fina que nos satisface y nos invita a un segundo sorbo. Servir fresco pero no demasiado para disfrutar de los aromas de este sake. Absolutamente en el vaso de vino blanco.